Si eres un adulto joven (menor de 35 años) y tienes una hipermetropía media o baja sin corregir, puedes ver bien de lejos y de cerca; sin embargo, cuando trabajas largas horas en visión próxima o pasas mucho tiempo frente a las pantallas, aunque tu visión en general se mantiene nítida (a veces puede haber fluctuación de la visión), puedes experimentar cansancio, dolor de cabeza, enrojecimiento, prurito, entre otros, por el sobreesfuerzo de tu sistema visual y muscular.
Esto también puede suceder si ya estás usando gafas pero tu corrección es insuficiente.
Ante tanto esfuerzo sostenido, algunos hipermétropes presentan problemas para relajar la visión al final del día, viendo borroso como los miopes cuando miran de lejos.
De otro lado, si tienes hipermetropía de media a alta, vas a presentar visión borrosa y riesgo de que se desarrolle una desviación en tus ojos. Por eso es importante que visites a tu profesional de la visión para que te realice un examen completo y te corrija el problema visual bien sea con anteojos o lentes de contacto, con los filtros adecuados.
