La terapia visual basada en neuroplasticidad ofrece la posibilidad de recuperar la visión en pacientes con baja visión por trauma cerebral, gracias a los avances presentados por la Doctora Yomar Said Malaver y la Doctora Ingryd Lorenzana en Franja 2025. Este enfoque innovador, desarrollado en la Universidad de Memphis, combina tecnología de vanguardia y evidencia clínica para estimular la regeneración neuronal y optimizar funciones visuales dañadas. En el simposio de baja visión se mostraron casos clínicos con recuperaciones de hasta un 80 % en tan solo tres meses.
Desde hace décadas, la neuroplasticidad se reconoce como la capacidad del sistema nervioso para reorganizar sus conexiones tras lesiones o estímulos específicos. Aplicada a la salud visual, esta propiedad abre nuevas puertas para pacientes con baja visión posttrauma, un grupo que hasta ahora dependía de métodos convencionales de rehabilitación con resultados limitados y plazos prolongados.
El protocolo terapéutico ideado por la Doctora Said Malaver en colaboración con la Doctora Lorenzana identifica primero las zonas cerebrales afectadas mediante pruebas diagnósticas avanzadas. A partir de ese perfil, se diseñan ejercicios personalizados que combinan estímulos dicópticos, estereogramas de neuroestimulación y electromagnetoterapia. Cada sesión, guiada por el software de Lorenzana, adapta la intensidad de los ejercicios según la evolución del paciente y permite un seguimiento remoto desde el consultorio.
La herramienta digital desarrollada en la Universidad de Memphis incorpora algoritmos que modulan estímulos visuales repetitivos para “desenmascarar” funciones compensatorias de la corteza y fortalecer áreas retinianas debilitadas. Su interfaz intuitiva facilita la adhesión al tratamiento incluso en pacientes de edad avanzada, y habilita terapia domiciliaria sin riesgos de desaliento o abandono.
Los resultados presentados en Franja 2025 son contundentes: pacientes entre cincuenta y cincuenta y cinco años con ambliopía profunda lograron mejoras de hasta un ochenta por ciento en agudeza visual en apenas tres meses, frente a los dos o tres años requeridos por técnicas tradicionales. Además, este enfoque se aplica con éxito en recién nacidos, adultos mayores y diversas etiologías de daño cerebral, lo que demuestra su versatilidad clínica.
Profesionales del simposio participaron en el taller “Terapia pasiva en pacientes post trauma cerebral”, donde experimentaron en directo los protocolos de neuroestimulación y comprobaron la capacidad del software para adaptar las rutinas de forma precisa. Asimismo, la Doctora Lorenzana anunció el lanzamiento de su libro Me, My Brain and I, que detalla las bases científicas y casos de éxito que avalan esta innovación.
La adopción de la neuroplasticidad en la rehabilitación óptica marca un antes y un después en el manejo de la baja visión post trauma. La terapia desarrollada por la Doctora Yomar Said Malaver y la Doctora Ingryd Lorenzana ofrece a los profesionales una solución eficaz, basada en evidencia clínica, que reduce drásticamente los tiempos de recuperación y mejora la calidad de vida de los pacientes.