Jorge Alberto García fue un empresario colombiano en el área de laboratorios ópticos, creó una fábrica de lentes oftálmicos y desde Colombia exportó a diferentes países del mundo, al punto que abrió sucursales en el exterior. Fue un hombre muy alegre, visionario y comprometido con su profesión, quien creó, junto con Paola Lievano, Optiservices Group Ltda. una empresa que cuenta con 133 empleados en los 15 puntos de Colombia y una sucursal en La Florida, Estados Unidos. Este fue su último sueño hecho realidad, Jorge Alberto falleció el 16 de enero de 2022. 

El personaje de esta edición recibe un reconocimiento póstumo por el buen trabajo realizado en el sector óptico, por eso es que su hijo German García compartió con los periodistas de Franja Visual la historia de su padre.

Este gran hombre dejó una huella en el sector 

ESTE GRAN HOMBRE DEJÓ UNA HUELLA EN EL SECTOR ÓPTICO Y SIEMPRE SERÁ RECORDADO POR EL IMPORTANTE TRABAJO QUE HIZO PARA QUE CRECIERA ESTA INDUSTRIA

Franja Visual (F.V.): ¿Cómo empieza la historia de Jorge en el área de los laboratorios ópticos?

Germán García (G.G.): Inició su trabajo a finales del año 1989 con el laboratorio óptico Tecni Lens, propiedad de Alán Pearson y Leopoldo Mejía, quienes deciden fabricar lentes y por tanto envían a España a mi padre a conocer todo el proceso. Él aprende el arte y regresa con la misión de establecer una fábrica para esta empresa. El objetivo se cumple y después de varios años al frente de la operación decide independizarse para crear, junto con un amigo, la empresa Incolens, con el objetivo de fabricar bifocales Flat Top e invisibles en CR39. Alcanzaron a fabricar más de 4 mil lentes diarios.

F.V.: ¿Cómo fue el proceso de crear su propia fábrica? 

G.G.: Jorge Alberto se asoció con José Héctor Castañeda para crear Incolens, inicialmente la operación se distribuía al mercado colombiano y rápidamente se amplió a Ecuador y Perú, entre otros países. El éxito de su propuesta los llevó a abrir fábrica en Perú. Así fueron creciendo y expandiendo su propuesta comercial en el continente, operación que fue reconocida por el estado colombiano bajo el “Premio a la Excelencia” que en ese momento patrocinó la empresa de correos Servientrega. El premio fue entregado por el presidente de la República de Colombia de ese momento, Álvaro Uribe, un reconocimiento a todo ese esfuerzo y nivel que habían llegado como Pymes. 

F.V.: ¿Qué pasó con Incolens?

G.G.: Después de muchos años de trabajo, llegaron a un acuerdo con su socio José Héctor, quien compró el 100% de las acciones y en la actualidad, sus hijos, Daniel y Fabián continúan los procesos de lentes Flap Top e invisibles.

F.V.: ¿Qué pasa entonces con la vida empresarial de Jorge Alberto?

G.G.: El trabajo realizado en Incolens incluyó la apertura de varios puntos de venta en diferentes ciudades de Colombia. En ese instante la competencia por parte de las fábricas asiáticas ya era muy fuerte, competir con su propuesta comercial era muy duro, así que mi padre junto con Paola Lievano crean una nueva empresa en el año 2008, Optiservices Group, juntos se dedican a la importación y comercialización de lentes oftálmicos, hasta que logran inaugurar una moderna planta de producción para talla digital y recubrimiento anti reflejo. Hacen buenas alianzas con fabricantes y diseñadores de lentes, crean sus propias marcas y empiezan una serie de aciertos que generan el crecimiento de la empresa como distribuidores de lentes y laboratorio óptico.

F.V.: Inicia la historia de Optiservices Group. Cuéntenos un poco sobre este emprendimiento de Jorge Alberto

G.G.: Mi padre inicia esta nueva empresa en una etapa de empresario muy interesante, muy madura. Había tenido el recorrido corporativo como empleado, como propietario de empresas en otras áreas, desarrollando dos fábricas de lentes y una operación de laboratorio, así que el laboratorio óptico Optiservices Group es el resultado de toda su experiencia empresarial y a la que dedicó los últimos años de su vida. Hoy en día es un laboratorio digital, que tiene la más reciente tecnología, con sucursales en las ciudades más importantes de Colombia y una operación en Miami, Estados Unidos. 

F.V.: ¿Jorge Alberto siempre estuvo vinculado con el sector óptico?

G.G.: Empezó en otras áreas, donde tuvo todo el entrenamiento para organizar lo que logró con sus empresas en el sector óptico. Siempre estuvo vinculado con el área comercial, inició en una reconocida fábrica de cortinas, Hunter Douglas y luego en Manufacturas Águila, fabricantes de maletines; en estas empresas, como empleado, tuvo un muy buen desempeño en las ventas y pudo demostrar sus grandes habilidades comerciales. Por eso, después, creo su propia fábrica de billeteras y artículos de cuero, abrió una empresa que se llamó Mercacosto, que repartía mercados en los jardines infantiles de Bogotá, emprendimiento exitoso que realizó con mi madre, pero una vez que conoce el sector óptico y los lentes oftálmicos, no hay vuelta atrás, el tema lo apasionó y lo llevó al camino que construyó. 

F.V.: Ahora que menciona a su madre ¿Cómo está compuesta la familia de Jorge Alberto?

G.G.: Nosotros somos tres hermanos. Del primer matrimonio con Ana somos dos: José Alberto, el mayor y sigo yo. Mi padre se separa de mi madre y años después se vuelve a casar con Paola Lievano y con ella tiene a mi hermanita, Laura Jimena.

F.V.: ¿Qué quiere usted resaltar que recordemos de la vida de Jorge Alberto García? 

G.G.:  La actitud de mi padre frente a todo, era un hombre optimista, sus proyectos estaban llenos de energía y lógica. Era un apasionado por su trabajo y su familia. Su éxito empresarial se debió a su capacidad de mantenerse a pesar de los obstáculos, fue un luchador comprometido. Siempre tenía una idea de crecimiento, de innovación, su mente era muy productiva y tenía la capacidad de llevar sus ideas a la realidad. 

Gracias Germán García, tiene un legado importante en su ADN. Esta entrevista es un homenaje y un registro corto de un empresario que deja huella y es ejemplo a seguir. Paz en su tumba.

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