Esta es una columna de opinión realizada por el optómetra Barry Eiden, Presidente y Director Médico de consultorio North Suburban Vision, además es profesor clínico en la Universidad de Illinois, Chicago, Estados Unidos, para la revista Contact Lens Spectrum.

A medida que más profesionales de la salud visual se involucran en la adaptación de lentes esclerales, la pregunta debe enfocarse en si la experiencia del profesional es importante o si los nomogramas de ajuste son tan poderosos que la experiencia es un factor menor para el éxito de la adaptación.

Recientemente, se publicó un estudio que analizó la curva de aprendizaje de la adaptación de córneas regulares, normales e irregulares con lentes de contacto esclerales.1 El objetivo fue evaluar la curva de aprendizaje de un profesional que tenía poca experiencia en la adaptación con lentes esclerales: durante los primeros 156 ajustes consecutivos en córneas irregulares y regulares, mediante un ensayo de ajuste. La serie de casos de dispensación prospectiva incluyó un total de 85 sujetos (156 ojos), 122 ojos que tenían córneas irregulares y 34 ojos que tenían córneas regulares. Todos los lentes fueron adaptados por el mismo profesional. Se estudiaron las primeras 156 adaptaciones consecutivas para estimar el número de lentes de prueba requeridos para lograr el ajuste óptimo y el número de reordenes requeridas.

Los resultados se dividieron en ocho grupos de 20 adaptaciones. Indicando que hubo una disminución en el número de lentes de prueba requeridos para lograr un ajuste óptimo de 2.35 ± 0.18 lentes en los primeros 20 ajustes a 1.56 ± 0.13 en los últimos ajustes (p <0.05, Wilcoxon). En cuanto al número de reordenes, también hubo una disminución de 0.95 ± 0.17 en los primeros ajustes a 0.25 ± 0.11 en los últimos ajustes (p <0.05, Wilcoxon). Aunque no fue estadísticamente significativo, hubo un aumento en el uso de diseños tóricos con una experiencia cada vez mayor.

Los autores concluyeron que la experiencia de adaptación profesional redujo tanto el número de lentes de prueba requeridos para lograr la mejor adaptación como el número de reordenes con el tiempo. Después de los primeros 60 casos, hubo una reducción significativa en los lentes de prueba y las reordenes necesarias.

Este estudio analizó solo cómo la experiencia afectó el éxito apropiado de los practicantes. Otro factor es el éxito que tiene un especialista en la resolución de problemas para los pacientes que usan lentes esclerales. Más allá del “éxito de ajuste” inicial, aquí es donde hay un obstáculo en el manejo de lentes esclerales. En mi opinión, lo que se lleva a casa aquí es que la experiencia cuenta y aquellas son las que hacen un verdadero compromiso con la práctica de lentes esclerales harán lo mejor para sus pacientes. Aquellos que no incursionan y hacen solo un caso aquí y otro allá probablemente no están brindando el más alto nivel de atención.

 

Referencia:
Macedo-de-Araújo RJ, van der Worp E, González-Méijome JM. Curva de aprendizaje profesional en el ajuste de lentes esclerales en córneas irregulares y regulares mediante un ensayo de ajuste. Biomed Res Int. 2019 28 de enero; 2019: 5737124.Imagen tomada de: https://cdn-img.health.com/sites/default/files/styles/large_16_9/public/styles/main/public/contacts-eye-gettyimages-158953284.jpg?itok\u003dmx-6P2_v\u00261533674052
Info tomada de: https://www.clspectrum.com/?eid=432725182&bid=2396051

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