Es importante crear conciencia en el profesional de la salud visual de que la corrección de un defecto visual, aunque involucre los últimos avances científicos y la más alta tecnología, debe tener en cuenta las características ópticas y oftálmicas propias de cada material, la relación del sistema lente-montura-ojo y, finalmente, las particularidades del sistema visual de cada paciente. Por eso, es fundamental recordar algunos aspectos que logran una adecuada adaptación.
La refracción: es el cambio de dirección y velocidad que sufren los rayos de luz al pasar de un medio con propiedades físicas particulares a otro de propiedades físicas diferentes. El índice de refracción es característico del material en que se fabrique el lente y se define como la razón entre la velocidad de la luz en el vacío y la velocidad de la luz en el material que se propaga. En lentes oftálmicos se considera bajo índice (> a 1.48 y < a 1.53), medio índice (> a 1.54 y < a 1.60), alto índice (> a 1.61 y < a 1.70) y muy alto índice (> a 1.71)
Número Abbe: en óptica física, el número Abbe es una cantidad numérica que indica la dispersión cromática producida por un medio óptico, es decir, cuánto se dispersa la luz blanca al atraviesa el material. Fue analizado y estudiado por Ernest Abbe, un físico alemán. Entre más bajo el número Abbe mayor es la dispersión cromática
Espesor: es el valor en milímetros medido desde la superficie anterior hasta la superficie posterior del lente. Depende de la fórmula, material de fabricación del lente, índice de refracción, diámetro y montura seleccionada. El espesor central depende de los valores de la ságita de las dos superficies del lente.
Transmisión: es la capacidad que tiene un material para ser atravesado por la luz y está directamente relacionada con la transparencia del material. Este factor se expresa en porcentaje (%) y representa la cantidad de luz que atraviesa el material en relación con el total de la luz que incide en el sistema óptico. Se conoce también como transmitancia.
Absorción: se conoce como absorbancia y se define como la cantidad de energía radiante que un medio óptico no deja pasar pero que tampoco refleja. En los lentes oftálmicos la absorción más importante que se debe tener en cuenta es la de la radiación ultravioleta (UV) ya que es nociva para la salud ocular y visual.
Reflexión: es el cambio de dirección que experimenta una onda luminosa al chocar con una superficie. Depende del ángulo de incidencia y del índice de refracción. Es importante tener en cuenta que a mayor índice de refracción mayor reflexión. Este fenómeno genera las “imágenes fantasmas” en los lentes.
Recordar estos conceptos es vivir la mecánica oftálmica y generar en el paciente una alta satisfacción, una adecuada calidad visual y una adaptación perfecta.
Docente Universidad de La Salle
Editor del Área de Lentes Oftálmicos
Referencias
– Caum, J. (2000). Tecnología óptica: lentes oftálmicos, diseño y adaptación. México: Alfaomega.
– Instituto Colombiano de Normas Técnicas y Certificación. (2011). Norma Técnica Colombiana. NTC5847. Óptica oftálmica. Lentes oftálmicos montados. Bogotá: Icontec.
– Perdomo Ospina, C. (2009). Fundamentos en lentes oftálmicos. Bogotá: Ediciones Unisalle.
Salvadó Arqués, J., & Fransoy Bel, M. (2000). Tecnología óptica. México: Alfaomega.
