La educación ha sido la pasión de este optómetra peruano. Desde que culminó su carrera en 1992, ha trabajado para lograr que la enseñanza en Perú y Latinoamérica sea cada día mejor. Con pasión habla sobre los avances que ha tenido la universidad en su país y cómo a través de la pedagogía pretende transformar la optometría generando líderes en el sector de la salud visual. El área que más le ha apasionado a lo largo de su vida profesional es la de los lentes de contacto. No piensa abandonar nunca esta labor, en cambio, quiere crear una forma de trascender, realizando investigaciones que informen con profundidad a los especialistas.
Franja Visual (F.V.): ¿En qué momento de su vida decidió ser optómetra?
Guillermo Carrillo (G.C.): Comencé a estudiar ingeniería industrial, pero en ese tiempo en mi país se presentó una época muy complicada desde el punto de vista económico, eso me obligó a dejar la carrera. Mi padre había trabajado muchos años en el área comercial de una óptica, entonces surgió la idea de poner una óptica. Mi inicio en la optometría fue una forma de ayudar a establecer un negocio familiar. Luego decidí estudiar optometría que en Perú tiene dos etapas, una técnica y otra profesional. Terminé la primera que tenía una duración de tres años y en ese momento no había muchos docentes, en nuestro periodo de formación teníamos dos o tres y uno de ellos, Robín Rodríguez, me propuso, al terminar mis estudios, comenzar a enseñar. Entonces mi vinculación fue muy temprana, con un aprendizaje acelerado, porque tenía que aprender el doble de rápido para poder enseñar a los estudiantes y tratar de forjar un futuro mejor para la optometría. Luego en el año 2004 terminé mi formación profesional. Hoy tengo 25 años de experiencia en la docencia en los que he tenido un aprendizaje continuo, inicié dictando áreas como: óptica oftálmica, óptica física y geométrica. Después enseñé lentes de contacto.
(F.V.): ¿Hace 25 años cómo era el proceso de enseñanza?
(G.C.): Era difícil porque estamos hablando del año 1992. Para preparar la clase utilizaba los pocos textos disponibles en inglés, que por suerte manejaba. También aprendí de profesionales de mucho prestigio en Colombia, que hoy en día son grandes amigos. En 1993 viajé a Colombia y luego a la Academia Americana de Optometría, todo esto con el fin de tener nueva información para tratar de entender cómo se podía enseñar de mejor manera para lograr un aprendizaje efectivo en los alumnos. Prácticamente hice un aprendizaje empírico, para formar un conocimiento lo suficientemente bueno.
(F.V.): ¿En qué ha cambiado la educación en optometría en Perú?
(G.C.): Cuando yo era estudiante teníamos solo una institución que era de optometría de nivel técnico, hoy en día tenemos tres de nivel técnico y dos de nivel profesional. Pasamos por un proceso de calidad profesional en el 2005, que permitió a las personas graduarse en la universidad como optómetras. A raíz de eso han salido muchos egresados de optometría, en este momento hay cerca de 2.800 profesionales y muchos de los mejores han sido convocados para que ingresen a la docencia, para que también tengan la iniciativa de investigar. Hoy en día, hay una gran cantidad de docentes que se destacan en diferentes áreas, así que vamos viendo que ese trabajo que fue sembrando una semilla ha ido creciendo poco a poco. Es una profesión que acá en el país inició desde hace 35 años.
(F.V.): ¿Cómo es su trabajo hoy en día?
(G.C.): Tengo la suerte de tener un trabajo a tiempo parcial con IACLE, las responsabilidades con la organización son de soporte académico a la educación de lentes de contacto y de alguna forma lo combino con la consulta, eso me permite la oportunidad de tener un tiempo organizado con los pacientes para hacer el análisis adecuado. A la docencia le puedo dedicar específicamente unas 10 horas a la semana, es una labor que nunca dejaré de realizar, esa pasión por la docencia es algo que uno tiene permanentemente al conectarse con el estudiante, de esa forma se renueva el espíritu de seguir caminando en la misma dirección para ver el creciendo de la profesión en mi país.
(F.V.): ¿Por qué decidió enfocarse en el área de lentes de contacto?
(G.C.): los lentes de contacto combinan dos aspectos importantes, el fisiológico y la corrección óptica, esto hace atractiva esta área en particular. Es interesante saber cómo funciona el tejido y cómo tratar de hacer que este cuerpo extraño pueda mantener el equilibrio en la superficie ocular y darle al paciente bienestar y buena visión. Además, en la medida en que se han descubriendo cosas como el manejo de las complicaciones, hemos tenido la oportunidad de observar la evolución en esta área, desde los primeros materiales de LC blandos, hasta los actuales. Sin embargo, hay grandes retos y barreras que son las que tenemos que ir trabajando. Lo motivante es que ese conocimiento nunca termina, siempre hay cosas nuevas. Hay nuevos grupos de investigación que permiten dar cuenta de temas como el control de la miopía, aportes al tema del ojo seco que está asociado al uso de LC, cómo aumentar el bienestar, entre otros y en ese escenario la contactología tiene muchos atractivos que la hacen interesante a los profesionales.
(F.V.): ¿Cuál es su función como Coordinador Regional para América Latina de IACLE?
(G.C): A mí me toca el privilegio de liderar un grupo de profesionales que son docentes del área de lentes de contacto, es apasionante formar a los educadores. El grupo IACLE ha hecho que el conocimiento científico se pueda usar en la clínica. Mi rol es el de coordinador de la región, desde Canadá hasta Argentina, de la actividad académica con las instituciones formales que ofrecen la especialidad de contactología. También, llevarles las herramientas que tenemos, dirigir grupos en cada uno de estos países para que sean los líderes que promuevan este desarrollo. De esta forma se pueden formar mejores profesionales, que promuevan el uso de lentes de contacto.
(F.V.): ¿Cuál es el futuro de Guillermo Carrillo?
(G.C.): La idea que tengo con algunos colegas de Perú es tratar de desarrollar investigación y realizar publicaciones. Queremos que ese conocimiento clínico, tenga una base científica más sólida y seguir trabajando en el área de la docencia, pero con una profundización mayor. Mi proyecto sería tener una unidad de investigación, para de esta forma trascender profesionalmente, que es lo más relevante para la vida de una persona.
(F.V.): ¿Cómo ha sido la experiencia de tener un programa radial especializado en LC?
(G.C.): Queríamos llegar a todos los miembros de IACLE a través de un medio diferente. Es la primera actividad de este tipo que se hace en la organización, en otros continentes no hay algo similar. Esto ha impactado de una manera gratificante, porque lo que hemos venido haciendo es que los miembros de IACLE participen en el programa, que nos cuenten que están haciendo y qué intereses tienen. Esta experiencia ha sido enriquecedora tanto en el caso particular mío, como para los que han participado. También ha servido para que la industria de lentes de contacto vea que los profesionales con un mensaje claro podemos cambiar el manejo de los pacientes y potencializar el uso de LC, porque estos son una forma de corrección segura para el paciente, que cuando se manejan de la mejor forma, se logra el mayor beneficio para las personas. Así de esta manera incrementamos su uso en América Latina.
(F.V.): ¿Qué actividades realiza con su familia?
(G.C.): Normalmente tengo todos los sábados disponibles, trato de estar con mi familia todos los fines de semana, salir de paseo en la medida de lo posible, cambiar la rutina del día a día, salir de Lima, ir al campo y comer con ellos. Mi plan favorito es estar en un lugar diferente libre de tecnología, olvidarnos que existe el teléfono, porque mis hijos son muy afines a los aparatos tecnológicos, tratamos de estar fuera de ese ámbito e ir a playa los primeros meses del año.
Cristian Gómez Valderrama.
Periodista Grupo Franja.
Contenidos lentes de contacto, segmento anterior y gremial.