Ver bien y no sentir molestias con el exceso de luz solar, es una necesidad de una enorme población que sufre de defectos refractivos y tiene que utilizar lentes oftálmicos la mayor parte del día.
Cuando se va a la playa, a un parque o simplemente se sale a la calle, es necesario protegerse de los rayos UV, ya sea la piel, el pelo o los ojos. Para eso es imprescindible el uso de un bloqueador solar y de unos lentes que protejan los ojos del 100 por ciento de los rayos ultravioleta. Para esto existe una alternativa muy efectiva: los anteojos de sol, los cuales se pueden hacer con casi cualquier prescripción.
Es posible que para una persona que trabaja la mayor parte del día en oficina o simplemente no sale de su casa, el filtro solar de sus anteojos con fórmula sirva perfectamente y no vea necesario comprar unos anteojos de sol con prescripción. Sin embargo, si el paciente tiene una vida dinámica, hace deporte y permanece en escenarios al aire libre o en los que hay superficies que reflejan la luz solar como el agua y la nieve, estos anteojos pueden ser una excelente alternativa.
¿Cómo elegir los materiales de los lentes de sol?
Los lentes de sol con prescripción pueden hacerse en varios materiales para adaptarse a los diferentes estilos de vida del paciente.
Si estos necesitan anteojos de sol que no se rompan porque practican deportes, tienen un trabajo al aire libre en un entorno peligroso o se trata de niños, pueden utilizar lentes en policarbonato o Trivex que son materiales resistentes a los impactos.
Para el caso de los pacientes con fórmula alta, la industria ofrece materiales de alto índice para lentes de sol, que son más delgados y livianos que los tradicionales.
Al considerar la calidad óptica los lentes, el vidrio pueden cumplir especificaciones de prescripción muy exactas, pero también hay materiales de lentes plásticos que ofrecen buena calidad óptica, lo que incluye el CR39, no obstante, la mejor opción en este caso depende de la fórmula.
Si los pacientes pasan mucho tiempo cerca de superficies reflejantes como agua, arena o nieve es importante considerar el uso de anteojos de sol con protección polarizada. Es fundamental cambiar la percepción que tienen muchos pacientes acerca de que no hay lentes de sol con prescripción oftálmica, pues estos pueden cumplir con su función correctiva y, además, protegerlos en todo momento de las afecciones causadas por la radiación UV.